"... La montaña nos hace silenciosos, sufrientes y sobrios. Invita a la reflexión, pide silencio, y forma una personalidad sobria y sin caprichos"

Puerto de Pilones - Sierra de las Nieves

QUEJIGALES - CAÑADA DE LAS ANIMAS - PUERTO DE LOS PILONES - CAÑADA DEL CUERNO - QUEJIGALES

Localización: Sierra de las Nieves - Paraúta - Málaga
Distancia: 9 km (circular)
Desnivel: 500 m
Trazado: Circular
Dificultad: Media
Fecha de realización: Noviembre de 2012








Esta vez salimos de nuestras sierras gaditanas y nos dirigimos a la Sierra de las Nieves, llamada así por el negocio de la nieve, la más singular de todas las actividades que se realizaron en este conjunto montañoso en épocas pasadas. Perteneciente a la Serranía de Ronda y ubicada a caballo entre la Andalucía atlántica y la mediterránea, constituye una de las últimas reservas de pinsapos existentes en la Península Iberíca. Junto con el pinsapar de la Sierra del Pinar en Grazalema, Cádiz, la presencia de esta especie, configura uno de los últimos residuos de aquellos extensos bosques que existieron en la era del Cuaternario. 

El objetivo de esta ruta será ascender desde el área recreativa de Quejigales (1.290 m) hasta el Puerto de Pilones (1.785 m) por la Cañada de las Animas y descender por la impresionante Cañada del Cuerno.

Nos alojamos en el Cortijo de la Nava. En pleno parque Natural, y entre los términos de Ronda, Parauta, El Burgo, Tolox e Istán, el Cortijo de la Nava es una finca dedicada hoy en día a la explotación cinegética y sus casas están habilitadas al turismo rural. Un lugar estratégico para alojarse de cara a realizar rutas por la zona, por lo económico y la belleza indescriptible que muestra el paraje en el que se encuentra enclavado, así que aún sin amanecer no perdemos la oportunidad de tomar las primeras instantáneas de la alborada.



El Cortijo aún de noche

 Desde la explanada de La Nava observamos el Torrecilla y la Alcazaba con las nubes encajonadas en el valle.


El Cerro Alcojona, con su forma piramidal vigila el Cortijo


Comenzamos la ruta en el Area recretativa de Quejigales, a la que llegamos en 10 km por un carril que parte del km 13 de la carretera A-397 de Ronda a San Pedro de Alcántara. 


Dejamos a nuestra derecha el puente que da acceso a la Ruta que asciende al Torrecilla  por la Cañada del Cuerno por la que nosotros regresaremos.



Los fotógrafos en plena acción.


Continuamos la ascensión hasta encontrarnos con la placa a Francisco Molina "Frasquito" en reconocimiento a su labor como guarda.

 

Con su caballo "Picúo" y su perro "Yanqui", cuidó y protegió el pinsapar durante 50 años (antes y después de la Guerra Civil). Fue el primer guarda del pinsapar de Ronda y cuentan de una enorme categoría humana. 

Imagen obtenida de la "Galería de personajes ilustres" de la Asociación Senderista "Pasoslargos"

 Abandonamos los restos de la casa del guarda, volvemos al presente y reanudamos la marcha.



 


El Peñón de Ronda (1.297 m) por encima del manto de nubes.
 

 

Tras disfrutar de las vistas, giramos a la derecha y encaramos la Cañada de las Animas.




 

 Saliendo de la Cañada la vista se abre y podemos visualizar el Peñón de los Enamorados (1.781 m).


Llegando al Puerto del Oso encontramos el pozo de nieve de Tolox



La meseta de Quejigales, al fondo... el Torrecilla. Nosotros continuamos sin desviarnos y por el sendero que nos lleva al Puerto de Pilones.

A partir de aquí, los pinsapos dejan paso a amplios quejigales de ejemplares viejos. Todo aquí tiene el peso de los años impreso, y los quejigos, ya casi sin hojas por el otoño, presentan figuras atormentadas con sus retorcidos troncos.






Por la senda que discurre bajo el viejo repetidor de UHF alcanzamos el Puerto de los Pilones (1.785 m) 


Caminamos por el carril y tras unos metros lo abandonamos para comenzar el descenso por la Cañada del Cuerno.


El sendero va descendiendo haciendo "eses" para romper la pendiente. El pinsapar... siempre precioso... viejo... centenario, nos muestra algún tronco abatido por el viento y la edad.


 

 Tras el bosque de pinsapos, la vista se abre y nos muestra ya, el aparcamiento del Area recreativa.


El final de la cañada transcurre entre pinos jóvenes y el suelo encharcado debido a múltiples arroyos que discurren ladera abajo. A la vista, el carril que nos llevará de vuelta al coche en unos metros.



De vuelta al cortijo de la Nava, nos espera el calor de la leña.




No hay comentarios:

Publicar un comentario